Atletas
árabes homenajeadas
A veces, la publicidad se anota un poroto –o
dos- a favor de la igualdad, como es el caso de la campaña Nike de este año,
dedicada a las mujeres árabes que se animan decididamente al atletismo. Bajo la
consigna: “¿Qué dirán de vos?”, se subrayan las dificultades de estas chicas
para lograr convertirse en profesionales y proseguir una carrera deportiva. En
un mundo tan dominado por figuras masculinas, cuatro mujeres atletas devienen
las musas de este video. La marca eligió a la boxeadora jordana Arifa Bseiso, a
la esgrimista tunecina Ines Boubakri, a la patinadora artística de los emiratos
Zahea Larija y a su compatriota y atleta de parkour Amal Murad. Asimismo, hace
su aporte musical la cantante del emirato yemenita, Badgees Falhi. La voz de la
artista saudita Fatima Al Banawi formula la pregunta antes mencionada, referida
a la reacción de la sociedad árabe musulmana frente a las mujeres que practican
deportes de competición.
Alice Guy,
pionera de pioneros 
El mes pasado de
marzo, la publicación Woman Madame consagró un video breve pero bien condensado
a Alice Guy, reconocida por muchos historiadores de cine como la primera
persona que dirigió un film de ficción, El
hada de los repollos (1896),
a los 23. Aunque tardíamente reconocida, Guy ha sido estudiada y celebrada en
las últimas tres décadas, no solo como realizadora sino también como audaz
productora e imaginativa adelantada en el empleo de efectos especiales
(llegando a influir sobre el mismísimo Georges Méliès), que también inventó
técnicas de montaje. El mes pasado se cumplieron 49 años de la muerte de esta
pionera cuya vida y obra es rescatada y analizada por la española Alejandra Val
Cubero en Alice Guy Blaché (Eila, España, 2016), entre otras
ediciones aparecidas recientemente, amén de la exquisita colección en dos cajas
de videos y textos de Gaumont, que reúne a los primitivos franceses. La
cineasta también ha inspirado obras de teatro: en España, 2012, se presentó Alice a la sombra de las maravillas.
Más cerca en el tiempo, el 5 de abril pasado, la Universidad de Chile inauguró
su cine-club con una función aplicada a Guy donde se pudo ver, entre otros
cortos, The Consequences of
Feminism, realizada durante el exilio en Estados Unidos.
http://www.woman.es/woman_tv/lifestyle/cine-conocemos-invento-sola-mujer-alice-guy 
La igualdad salarial es posible
Los países nórdicos
siempre han estado a la vanguardia en cuanto a derechos de las mujeres. En esas
latitudes, el país de las auroras boreales, las grandes llanuras nevadas y las
noches sin fin devino el 8 de marzo pasado el primer lugar del mundo en imponer
la igualdad salarial entre varones y mujeres. Para hacer cumplir la nueva norma
se cuenta con la buena fe de empresas públicas y privadas. El primer ministro
Bjarni Beneiktsson avisó que las cifras de los sueldos serán difundidas
públicamente. Cada empresa con más de 25 empleados deberá presentar un
certificado que pruebe que las remuneraciones que pagan son iguales para unos y
otras. Hasta el presente, en Islandia, como en tantas partes del mundo, ellas
ganaban menos: entre un 1 4 y un 18 por ciento.
YSL, avisos
sexistas
La ministra francesa
de los derechos de las mujeres, Laurence Rossignol, se pronunció el 9 de marzo
pasado por el retiro de la polémica campaña publicitaria de Yves Saint Laurent
que exhibía modelos filiformes en “posición humillante”, según palabras de la
funcionaria. En una de las imágenes, una mujer aparece tirada, las piernas
abiertas, en  tacones y medias de red. En la otra, una chica escuálida
sobre tacos aguja y patines se inclina en forma juzgada “excesivamente
explícita”. La ministra se dirigió a la maison para pedir que “cese la difusión de
estas imágenes, o, al menos, que se las modifique”. Finalmente, los afiches
fueron retirados: un ejemplo a seguir en casos semejantes donde la
representación del sometimiento de la mujer contribuye a la inequidad.
Historias de parteras
Pocas
investigaciones, pocos ensayos o libros de historia existen sobre las parteras
o matronas. Nathalie Sage Pranchère, signada por su primer apellido, acaba de
publicar en Francia L’école des sages-femmes. Naissance d’un corps
professionel, 1786-1917, con prefacio de Jean-Pierre Bardet (Presses
Universitaires François Rabelais, 456 páginas). Un riguroso trabajo que ofrece
un riquísimo corpus de fuentes y responde a la pregunta formulada en recientes
seminarios en ese país: ¿Qué es una partera? (en francés, sage-femme, es decir,
mujer sabia).
La verdad es que los
poderes públicos galos, incluso un poco antes de la Revolución, trataron de
desarrollar una política de cuidados de las embarazadas y las parturientas, a
fin de luchar contra la mortalidad de las madres y los bebés. De este modo, se
facilitaron mayores conocimientos a las matronas a través de redes nacionales
de cursos específicos. El estado francés creo un cuerpo intermedio entre
parturientas y médicos, obviamente imponiendo reglas: por un lado, difundir un
saber científico entre ciertas mujeres que tenían prohibido ejercer la
medicina; por otro, les acordó un status que rompía con esa situación de
segregación, permitiéndoles ganarse un dinero y gozar de cierta libertad fuera
del hogar. A fines del XIX, la medicalización del parto llevó los nacimientos
de la casa familiar al hospital, modificando la división de poderes entre
parteras y médicos.


